Nos dirigimos a ellos porque tras la adopción de Cooper nos encontrábamos algo perdidos, no teníamos las herramientas para afrontar algunas situaciones que se nos estaban presentando en el día a día.
Cooper es un amor de perro, pero tiraba constantemente de la correa en los paseos, muy nervioso en ocasiones y no atendía a ninguna indicación y cuando se quedaba solito en casa mordía y arañaba las paredes.
Hicimos un curso de Educación Básica canina con Ana y Alberto y con las pautas que nos iban indicando, constancia y trabajo hemos tenido buenos resultados.
Estamos muy satisfechos con la experiencia. Cooper ya no tira de la correa, los paseos son un placer y no una lucha. Ya no muerde ni araña las paredes en casa y está más tranquilo y relajado.
Desde entonces, seguirnos las pautas aprendidas en el curso para mantener lo que hemos avanzado.
Ana y Alberto son muy profesionales y cariñosos con los perritos, te dan confianza para realizar cualquier consulta, tanto de la conducta y comportamiento, como de alimentación o accesorios de paseo y juego.